El trabajo de constelaciones nace dentro de un “campo de información”, el cual es un campo sabio que tiene memoria, no tiene fronteras de tiempo ni espacio, sólo existe el ahora, no existe bueno o malo, solo existe lo que es. En este trabajo se revelan problemas escondidos y esta resolución sale de este campo sabio.
A través de un ejercicio de constelación se busca revelar dinámicas ocultas, revelar lo que no fluye y ponerle orden para que fluya la energía que llamamos AMOR. Las Constelaciones Familiares abren camino a la solución de conflictos, nos lleva a mirar al interior de nuestras relaciones. El propósito del trabajo es provocar un movimiento de sanación.
El trabajo de Constelaciones Familiares puede beneficiar:
- A personas que tienen dificultades en sus relaciones familiares, que se manifiestan en problemas emocionales, mentales o corporales.
- A personas que tienen problemas de pareja, convivencia o separaciones conflictivas, casos de adopción, abuso sexual, abortos.
- A aquellos que padezcan enfermedades graves, que tengan cualquier tipo de adicción y/o trastornos de la alimentación (bulimia, anorexia, obesidad).
- A personas que hayan sufrido repetidas experiencias de infortunio (duelos, muertes trágicas, suicidios, guerras) o deseen enfrentar hechos irremediables de su historia.
- A personas que tienen problemas vinculados con inmigración /emigración.
- A padres, educadores y psicólogos que tratan ayudar a los hijos con problemas de conducta, aprendizaje y desarrollo personal.
- A Consultoras de Empresas. Para problemas de liderazgo, lealtad, estructuración de responsabilidades, cohesión en los equipos de trabajo.
Si sientes que algo de esto resuena contigo, saca una cita para realizar una constelación individual o grupal, verás lo poderoso que es este trabajo.