¡Qué acierto! El programa diseñado a la medida se adecuó a nuestro equipo de la mejor manera posible. A través de prácticas tangibles y simples aprendimos no sólo a manejar y controlar el estrés, sino también a “escudriñar dentro” con el fin de concentrarnos mejor, agudizando así nuestras habilidades y estando más alerta y siendo más conscientes. Nos proporcionaron grandes “herramientas” para responder con mayor eficacia a nuestras exigencias diarias, tanto profesionales como personales.
Participante
Programa Corporativo de Inteligencia Emocional, 2015 |