El bienestar puede ser considerado como un estado de la persona cuyas condiciones físicas y mentales le proporcionan un sentimiento de satisfacción y armonía. Estar bien; en un nivel óptimo. Las familias como núcleo desean alcanzar ese nivel de satisfacción y armonía. Quieren funcionar bien y pueden hacerlo teniendo como centro el respeto mutuo y la amabilidad. Es de suma importancia que los pilares de una familia desarrollen sus habilidades para ejercer el rol parental de manera afectiva, asertiva y duradera. Siendo firmes y amables al mismo tiempo y teniendo en cuenta la repercusión que tiene el ejemplo a través del modelaje.